Pero Lolita, que vino desde Vilavella (Castelló), desde el principio tuvo claro que sería en Singulárea donde compraría la habitación de su hija, dejó en nuestras manos la distribución definitiva con la que finalmente conseguimos poner todo lo que ella y su hija nos solicitaron: Armario con puente, mesa de estudio amplia y una cama nido con arcón zapatero.
Y, como podéis apreciar, a pesar del poco ángulo con el que cuentan para hacer las fotos, ya que el espacio es muy, muy reducido, la habitación ha quedado muy despejada y clara, aún no teniendo demasiada luz natural.
¡GRACIAS LOLITA Y RAQUEL POR LAS FOTOS! ;)